Paco Gil ha venido hoy a nuestra clínica de Alicante para iniciar su tratamiento con la ortodoncia invisible y nos cuenta cómo le ha ido. Esta es la segunda entrevista sobre su experiencia con Invisalign.
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Ha sido una cita rápida, en la que me han explicado más detenidamente en qué consistirá mi tratamiento de ortodoncia invisible. Me han comentado que el objetivo del aparato dental que voy a llevar es enderezar mis dientes y recolocar el apiñamiento inferior. Y esto lo conseguiremos mediante alineadores.
Han abierto un Clincheck que es donde se van a ir viendo los movimientos de mis dientes y su evolución. Además me han explicado las pautas básicas de cómo usa este tipo de ortodoncia.
Mi tratamiento durará aproximadamente 1 año y requerirá de 30 alineadores personalizados para la primera fase. Yo mismo iré cambiando cada 12 ó 15 días de alineador para que mi boca se modifique poco a poco. En esta primera visita me han entregado el primer alineador, aunque me han comentado que en futuras visitas me entregarán entre 2 y 3, las correspondientes al periodo hasta la siguiente cita. Genial porque así evito tener que venir tan a menudo.
Al principio la sensación es de presión, sobre todo en las encías, pero dura poco, entiendo que la boca tiene que acostumbrarse. Es normal ya que la función de los alineadores es la de presionar a los dientes hacia la dirección donde deben colocarse.
Me han explicado cómo colocar y retirar los alineadores Invisalign, parece obvio, pero tiene su truco, ya que hay que presionar la parte delantera e ir encajando después hacia atrás, y finalmente presionar levemente los alineadores entre sí. Y para retirarlo al contrario, despegarlo poco a poco de los dientes.
Además tendré que lavarme los dientes después de cada comida y antes de colocarme de nuevo Invisalign.
La verdad es que es sencillo, porque son alineadores que no requieren un mantenimiento especial, simplemente los lógicos teniendo en cuenta que los voy a llevar en la boca unas 22 horas al día. Y creo que no me va a costar porque soy bastante estricto con mi higiene bucal. ¡Ah!, además me han dado un estuche para transportar mi aparato por si salgo a comer y necesito quitármelo.
Estética, pero sobre todo comodidad al poder comer sin ello y poder quitarlo si en alguna ocasión es necesario. Casi no se nota que llevo ortodoncia. Esto para mi es la mayor de las ventajas, ya que trabajo en el mundo de la moda y tengo continuamente eventos en los que la estética es fundamental. Como los alineadores puedo quitármelos es perfecto si tengo alguna presentación. Eso sí, tengo que llevarlas puestas el máximo tiempo posible al día,y quitármelos solo para comer.
Vuelvo en 15 días para ver cómo me he adaptado, y será cuando me entreguen los alineadores siguientes… ¡Empiezo ya mi tratamiento con la ortodoncia invisible!
Haznos llegar tus preguntas para Paco a través del blog y te las responderá en su siguiente visita a la clínica.
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